Ahora conoces mejor a tu pareja que cuando
comenzaste tu relación, sin embargo, intenta viajar en el tiempo para recordar,
mentalmente, qué fue aquello que te enamoró en un primer momento. Realiza un ejercicio de concentración mental para sentir los nervios de tus primeras
citas, la magia de cada encuentro.
1. Abraza
al otro suavemente, siente su respiración y trata de sincronizar la tuya. Ayuda
a reducir las inhibiciones.
2. A
medio metro el uno del otro, mírense a los ojos durante dos
minutos, tratando de ver lo más profundo de su ser, y después hablen de lo
que vieron. Esto crea vulnerabilidad, pieza clave en el vínculo emocional.
3. Sentados
o de pie, muevan manos, brazos y piernas como quieran, pero tratando de
imitar al otro, para sentir que se mueven a voluntad, pero sus acciones están
vinculadas al otro.
4. Déjate
caer de espaldas en una demostración de confianza.
5. Escriban
un secreto en un papel, inter cámbienlos y charlen sobre el tema.
Compartir secretos estrecha el vínculo.
6. Escribe
un pensamiento que quieras compartir y trata de comunicárselo al otro a
señas mientras él trata de adivinar.
7. Párense
a una distancia de metro y medio, fíjense en el otro, y cada 10 segundos
acérquense un poco más hasta invadir sus espacios y acercarse lo más que puedan
sin tocarse.
8. Pon
la palma de tu mano lo más cerca de la palma de tu compañero sin
tocarse. Al hacerlo por algunos minutos, sentirás no sólo su calor sino
quizás algunas chispas.
9. Redescubre el arte del beso, besa a tu pareja durante 10 minutos, sin permitir que se toquen nada de la cintura para abajo.
10. Acaricia los pies. Los pies están llenos de terminaciones nerviosas y acariciarlos es tan erótico como relajante.
11. Masajes. Trata de acariciar la piel de tu pareja lo más suavecito posible, ¡casi sin tocarlo! Sopla, humedece, pasa la punta de los dedos o de la lengua. Ya verás los escalofríos que le provocas.
12. Fuera de cama. No es un cliché, es realmente estimulante probar sitios poco convencionales para la pareja pues deben recurrir a nuevas poses, nuevas dinámicas que pueden alejarlos de la monotonía.