¿Qué es la infidelidad emocional?
La infidelidad emocional es cuando un miembro de la pareja engaña con otra persona de forma afectiva. Es decir, en la infidelidad afectiva no existe un acercamiento físico o sexual pero sí se comparte con una tercera persona emociones y sentimientos.
Una de cada diez mujeres y dos de cada diez hombres tienen
relaciones sexuales fuera del matrimonio, según datos del Instituto
de Investigación Psicológica, Clínica y Social, pero tres de cada
diez y cuatro de cada diez tienen "aventuras emocionales". ¿Por qué
esta infidelidad es más frecuente que la sexual? ¿Qué explicación
psicológica tiene? Las respuestas, a continuación.
El peligro: no está ocurriendo nada
La infidelidad sexual es bastante clara: un miembro de la pareja
rompe los límites de la relación y tiene algún tipo de contacto
sexual con alguien más. Aunque ambas traiciones -la emocional y la
sexual o física- implican complicaciones y la posible separación de
la pareja, el psicólogo Michael Formica, de Psychology Today dice
que la infidelidad emocional es mucho más complicada.
"Básicamente, se trata de un enamoramiento que es platónico pero
correspondido que no se demuestra con acciones como tener relaciones
sexuales o buscar entablar una relacion", explica el experto. Sin
necesidad de llegar a esto y ni hablar de amor siquiera, una persona
puede establecer una relación peligrosa de coqueteo, aún incluso sin
conocerla. ¿El mejor ejemplo? Una relación vía internet.
En este tipo de "relación" se sumerge en una especie de encuentros
en los que incluso se llega a generar mucha confianza donde se
llegan hablar de cosas que no tratas ni con la pareja misma, se
desarrolla una especie de control el querer saber qué hace, se está
pendiente de todas sus actividades, sin ni siquiera verse
personalmente y el interés de estar al tanto de todo, incluso en
este tipo de situaciones se llegan a preocupar más por esa persona
que está en su mente, que por la que está a su lado.
Las razones psicológicas
Ser infiel emocionalmente expresa que deseas ausentarte
(temporalmente) de la relación en la que estás actualmente sin tener
que abandonar a tu pareja en realidad. Ésta es la razón principal
por la que, según Formica, este tipo de infidelidad ocurre y es
también lo que escuda a quien la comete. La persona que lo hace
cuida siempre que sus acciones no impliquen necesariamente que está
haciendo algo malo.
El estar lejos de tu pareja puede aumentar el deseo que sientes por
él, pero tener un amante a la distancia, siempre ahí cuando lo
necesitas, se puede volver una adicción, según Formica. La emoción
de revisar tu correo para ver si te ha escrito, compartir miradas de
complicidad, releer las conversaciones que han tenido por chat,
etc., es la segunda razón que motiva a la infidelidad
emocional.
La combinación de seguridad y miedo es la tercera razón. "Miedo de
no querer que te descubran haciendo "algo" y seguridad de saber que
prácticamente 'no estás haciendo nada', comenta el psicólogo. Esta
combinación es el combustible ideal para mantener una aventura que
no implica acciones verdaderamente riesgosas.