El acto
sexual es cosa de dos y cada vez debemos estar más conscientes de que complacer
a nuestra pareja es casi tan importante como nuestro propio disfrute. Sin
embargo, cada persona es un mundo y no a todos nos gusta lo mismo. Así mismo,
como hay cosas que ellos no soportan que hagamos en el lecho las mujeres,
tampoco ellas soportan ciertas actitudes de los caballeros en mención, señores
la educación sexual no es solamente un proceder, es un habito que se debe
adquirir.
Saltarse
los preliminares
Aunque no exista un tiempo límite para ponerse a tono y entrar en calor, sí que es importante hacer una buena antesala, sobre todo para las mujeres que requieren de más tiempo para preparar su cuerpo para el placer.
Hombres si obvian estos pasos previos, la noche se puede complicar… Y es
que para el género femenino los preliminares son fundamentales. Sin embargo,
muchos hombres invadidos por el deseo se saltan la previa y van directos al
grano. Y es que no hay nada más frustrante que enfrentarse a un sujeto que en
lo único que piensa es en satisfacerse el mismo y entre más pronto mejor.
Que los invada la torpeza
No todos los hombres son torpes esto se debe en muchos casos porque se dejan apoderar de los nervios, en parte puede ser normal dependiendo de la situación, pero no hay nada más desalentador que un hombre que se deje ganar de la situación y en vez de dominarla, se permita hacer de cada paso una seguidilla de equivocaciones que por supuesto terminan matando el impulso de cualquiera.
Y por todos es sabido que el nerviosismo trae consigo, inevitablemente, la
torpeza. Pero para algunos parece más un castigo que un placer…
Falta de iniciativa
Igual que en muchas ocasiones son las mujeres las que toman las riendas, también es necesario que ellos dominen la situación. Lo más anti erótico es que un hombre indeciso no se atreva a tomar el mando.
A muchas mujeres les gusta sentirse dominadas. Pero infortunadamente hay
muchos hombres que, ya sea por miedo, nervios o falta de seguridad, se limitan
a seguir lo que la mujer dicta… Y eso las pone en un papel de madres, y no como
la amante dispuesta a cumplir sus fantasías.
Pretender que son actores triples xxx
Una de las pasiones de muchos hombres es hacer realidad lo que ven en el
cine para adultos. Ahora, esto los lleva a confundir ficción con realidad y eso
sí que irrita. Señores acepten lo que tienen con dignidad, y actúen de acuerdo
a la realidad no pretendan llevar a cabo sus fantasías como si estuvieran en
una película que dista más de ficción que de realidad, así que no se les ocurra
tratar a su mujer como si fuera la actriz que cumplirá con todos sus deseos,
esto sí que los deja fuera de lugar y lejos de hacer una jugada fulminante.
Acabar antes de tiempo
Nada peor que dejar a medias a tu mujer. A muchos hombres parece no preocuparles esto ya que una vez terminan, como que ahora haga lo que pueda con lo que quedo. Y es que muchas veces ocurre que este se detiene justo cuando ella no quiere que pare.
Según la revista Journal of Sexual Medicine, el tiempo ideal que debe durar el coito se configura en unos 7-13 minutos -sin tener en cuenta los juegos previos-pero el acto sexual es diferente en cada persona y es mejor no mirar el reloj, sino disfrutar del momento.
Los expertos estiman que las mujeres requieren, aproximadamente, de 20 a 30
minutos para excitarse y alcanzar el orgasmo -incluyendo besos, caricias, sexo,
estimulación etc.-. Por lo que el tiempo ideal de penetración se configura al
rededor de diez minutos.
Que no sean sutiles
El concepto de pasión en las mentes masculinas no es el mismo que en las femeninas. Muchos varones entienden por pasión ser unos salvajes y auténticos animales en la cama.
La pasión es el deseo de estar con la otra persona y que el coito con ella sea gratificante. Besos y caricias apasionados están bien. Ahora, a algunos hombres les puede el deseo, pierden el control y la perspectiva de lo que están haciendo. Y los besos se convierten en azotalenguas que parece que te quieran sacar brillo y las caricias parecen más latigazos que otra cosa.
Y esto a las mujeres les hace sentir incómodas y lo que en teoría debería
ser disfrute se convierte en un calvario, y no dejan ganas sino de mandarlos
para el otro lado y no precisamente de la cama, así que mucho cuidado con esa
fogosidad que no se convierta en agresividad.
No saber quitarse la ropa
Muchos hombres quieres mostrarse sexys ante las mujeres para seducirlas y aparentar ser el macho alfa. Algunos, que han visto muchas películas americanas, confunden conceptos y creen que es sexy y excitante lo que, en realidad, no lo es Y ni siquiera se le aproxima.
No son pocos los que piensan que son buenas ideas quitarse la ropa de una
manera que consideran sensual o realizar poses extrañas para marcar
musculatura. Y la realidad es muy distinta: Hombres esto no es nada sexy ni
morboso. Es ridículo y, en vez de encender la llama, la apaga.
Hay que saberse comportar
Muchos hombres como que el sentido común les juega malas pasadas, y tienen
ciertos comportamientos que simplemente no dejan ganas de volverlos a ver:
ejemplo, hay que permitirse que luego de la relación si bien viene un tiempo de
recuperación, que este no sea eterno, hay que asearse, hay que recoger las
evidencias que ya en un estado de conciencia normal no son agradables,
recuerden que así como el encuentro sexual tiene unos previos en los que prima
la emoción, también hay un después en lo que ya todo se ve con calma, así que
apliquen su educación sexual, antes, durante y después del encuentro.